lunes, 6 de marzo de 2017

HIPOCRESÍA

La pérdida de valores que vemos progresar en el mundo esta siendo acompañada -no puede ser de otra manera- de los antivalores que vienen a ocupar su espacio. Y es que el ser humano necesita de los valores. Si no lucha por conseguir los valores positivos, pues, automáticamente se instalan en él los antivalores, como son la mentira, la hipocresía, la burlona arbitrariedad y el cinismo rancio(con perdón de los primeros cínicos, porque también en esto hemos degenerado). Los llamo antivalores porque buscan el bien para mí, sin importarme los demás (para los que, generalmente, son malos).
Con la llegada de los mediocres, desaprensivos y cobardes al poder, los antivalores se han generalizado y potenciado, eso sí, disfrazados en un carnaval sin fin.
"Nadie está atacando a la familia", pero lo cierto es que con las medidas leguleyas, que se están tomando por las presiones del lobby del género y los "otros" (los que recogen los beneficios económicos colaterales), la familia se esta debilitando. Con el aborto pasa lo mismo. Lo real es que, hay países en los que más del 90% de los embarzos con problemas psíquicos en el feto, son abortados. Sólo este dato serviría para desmontar todas esas teorías del  "aborto, en defensa de la mujer".
En este momento de la Historia, más que nunca necesitamos gente que viva sus valores, que construyen su humanidad y la del próximo, de una forma feliz, transparente sin doblez. Y gente que, viéndolo sea capaz de alabarlo y gozarse con ello. Y esto sólo se transmite por ósmosis, que es indiferente a los medios profilácticos que nos ponen los medios de comunicación.
No es una conspiración, sino la NOCHE MORAL que nos envuelve, la que nos vuelve ciegos, sordos y mudos ante la Verdad, la Belleza, El Bien...

 "Señor, ¿cuándo te vimos hambriento, y te dimos de comer; o sediento, y te dimos de beber? ¿Cuándo te vimos forastero, y te acogimos; o desnudo, y te vestimos? ¿Cuándo te vimos enfermo o en la cárcel, y fuimos a verte?"
 Y el Rey les dirá: "En verdad os digo que cuanto hicisteis a unos de  estos hermanos míos más pequeños, a mí me lo hicisteis." Mt 25,38

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